jueves, 12 de febrero de 2015

Llanadas de Sedella. En busca del tejo y del roble. 11 de enero de 2015

Comentarios: Antonio Arana
Fotografías:   Antonio y Juanlu

 Hola amigos.

Durante un curso de Iniciación a la Micología que ha tenido lugar en el Vivero Algarrobo, situado en la carretera que se dirige desde Vélez-Málaga a Alhama de Granada, el profesor del curso, Nacho Salar, guía del Parque Natural de las Sierras Tejeda, Almijara y Alhama, nos informó de la existencia de algunos árboles emblemáticos situados en la parte norte del parque natural. Concretamente nos habló de un roble melojo y de un tejo (descrito en el libro "10 Años de Estudio sobre Taxus Baccata (Tejo) y la Sierra Tejeda").

A quienes nos gusta patear la sierra no planificamos una ruta pensando sólo en subir una montaña y, una vez realizado el reto, descenderla y ya hasta la próxima ruta.

Siempre llevamos, como parte del equipo, la cámara fotográfica, , un bloc de notas y un bolígrafo, además de mapas y algunas guías de plantas y animales de la zona que vamos a recorrer ese día. Es de esta manera como, de forma progresiva, vamos aprendiendo el nombre de la flora silvestre, podemos contemplar animales casi imposible de poder ver "abajo", en la ciudad, estudiando sus diversos hábitats, fotografiando sus huellas o admirando su vuelo... Y, por supuesto, buscar los tesoros naturales que guarda la montaña. 

Conocemos muchos robles, tejos, alcornoques, encinas.. en nuestro parque natural y aunque nos hemos movido infinidad de veces por las Llanadas de Sedella, realizando diversas rutas, no nos habíamos fijado en esos dos árboles emblemáticos de los que nos habló Nacho. Así que con el material necesario nos subimos en los 4x4 y, desde  Salares, comenzamos el ascenso hacia el Collado del Sablazo o Puerto de la Orza para dirigirnos por la parte sur del Cerro Albucaz hacia las "Llanás" que es como se conoce dicha zona en el lenguaje popular.

Antes de llegar, detenemos los vehículos junto a un enorme nogal, mereciendo la pena dedicarle 10 minutos de contemplación y estudio, además de hacerle algunas fotografías.



Nogal. Juglans regia.
 




Posteriormente, nos dirigimos a la zona donde, según la información que hemos recabado, debe encontrarse el roble. Y no cuesta ningún esfuerzo localizarlo por su forma y porte.




A nuestra izquierda desciende el Barranco de la Cueva de Parra por cuya parte baja discurre el Arroyo del Cerezal.



Barranco de la Cueva de Parra.



Roble melojo. Quercus pyrenaica.


Medimos el perímetro del tronco: dos metros y once centímetros, lo cual nos da un diámetro de 67 centímetros aplicando la fórmula de la longitud de la circunferencia. 








Tras jugar un poco intentando abrazarlo para tomar conciencia del grosor del tronco, comenzamos a descender por la ladera en busca de nuestro tejo.

Realizamos la medición del tronco, no sin problemas debido a la gran cantidad de ramas bajas que posee y que hacen casi imposible que obtengamos un dato fidedigno. A pesar de ésto, conseguimos una medida aproximada del perímetro del tronco  de dos metros y veintinueve centímetros.En el libro del tejo citado se hace referencia a un diámetro de 80 cm lo cual supone un perímetro de dos metros y cincuenta y un centímetros.Nos han faltado 22 centímetros.

Es un soberbio tejo hembra de unos cuatro metros de altura.



Midiendo el perímetro del tejo (Taxus baccata).






En los alrededores del tejo hay abundantes cenizos o rascaviejas (Adenocarpus decorticans) y majuelos (Crataegus monogyna).



Base del tejo.

Descendemos hacia el barranco. No pretendemos hacer hoy una ruta larga porque Pedro tiene que trabajar a las ocho de la tarde en la UCI del hospital.



Hacia el barranco.

El suelo está alfombrado de hojas de roble melojo (Quercus pyrenaica), arce granadino (Acer granatense) e, incluso, de mostajo (Sorbus aria).





Cruzamos el barranco y nos detenemos para tomar referencias de la situación del roble y del tejo desde esta vertiente.




La vista de las Llanadas y del inicio de la ruta hacia la Maroma (2068 ms de altitud) es formidable.




Hace frío y nos detenemos a tomar algo en un soleado llano, aprovechando para absorber hasta el más mínimo rayo del sol, cual si fuésemos lagartijas.



Las "lagartijas"



Vuelta y vuelta.

Desde los 1.600 metros de altitud a la que nos encontramos podemos contemplar el mar y las poblaciones costeras.



Vista desde las Llanás. A la izquierda se aprecian los edificios de Torrox-costa.

Hacia el oeste se aprecia la cumbre redondeada de la Maroma y, entrecerrando los ojos, podemos intuir el vértice geodésico de la misma que hemos confundido en un primer momento con la figura de un montañero.



 

Nos aseguramos con el zoom de la cámara fotográfica y los prismáticos de que se trata del monolito con el vértice geodésico.



 Vértice geodésico de la Maroma.







Con Inma y Rodrigo, nuestro traumatólogo.

Durante el descenso en coche observamos un gran alcornoque cuyo estudio no se nos puede escapar tampoco. Así que bajamos de los coches con la cinta métrica y nos dirigimos hacia él. 



Pedro y Carlos midiendo el tronco del alcornoque.

El perímetro es de tres metros y  catorce centímetros lo cual nos da un diámetro de un metro.

El alcornoque se encuentra junto a una pequeña y preciosa charca en la que podemos apreciar ranas y algunos pequeños peces.



Nuestro alcornoque (Quercus suber).

Y así finalizamos hoy nuestra ruta de naturaleza con el estudio de algunos árboles emblemáticos del parque natural.


Salud montañeros.

martes, 10 de febrero de 2015

El Fraile (Altos del Sábar). Domingo, 2 de Noviembre de 2014


Comentarios:   Antonio Arana
Fotografías: Juanlu y Antonio

Entre Alfarnatejo y Riogordo se interpone un macizo montañoso espectacular conocido como los Altos del Sabar. Ya conocemos el Tajo de Gomer (1.129 ms) que ha sido la última ruta referida en el blog. Hoy vamos a ascender el Tajo del Fraile, de 1.229 ms de altitud. El tercer pico es el Tajo de Doña Ana, de 1.202 ms.
Vamos a ascenderlo por la parte norte, dejando a nuestra espalda el pueblo de Alfarnatejo. Por esta parte hay una especie de ancha entrada natural conocida como Matagallar (mapa topográfico nacional de España a escala 1:25.000).



A unos 400 ms atrás hemos dejado la conocida Fuente del Conejo.
Al iniciar el ascenso debemos detenernos por los múltiples disparos de escopeta que suenan muy cerca de donde nos encontramos, pudiendo ver algo más arriba la figura de algunos cazadores parapetados tras algunas rocas. Hablamos entre nosotros y decidimos que lo mejor es no correr riesgos y cambiar hoy esta ruta por otra más lejana, pero un grupo de montañeros de Granada se une a nosotros y decidimos entre todos subir. Por una vez, son los cazadores quienes nos dejan tranquilos y se abren a nuestro paso.








Vamos dirigiéndonos hacia el sureste porque es la mejor ruta para alcanzar la cumbre.


Como siempre, vamos bromeando haciéndonos fotografías. Inma es hoy la única representante de las montañeras del grupo que ha podido venir. Y hay que quererla ¿o no?


Pues yo sí...

Llegamos a un pequeño collado desde el que giramos hacia el oeste para coger la cuerda que nos acercará al pico.


En el collado.


La cuerda rocosa. Al fondo, la cumbre piramidal del Fraile.

El cielo se encuentra nuboso aunque no hace frío. Ocasionalmente se abren algunos claros.


Hacia la cumbre.


Un corto descanso para aprovechar un despistado rayo de sol.

Encuentro algunos ejemplares de una preciosa planta silvestre conocida vulgarmente como "agujas" porque sus frutos terminan en un largo pico tan atractivo como las flores. También se les llama "relojes" pero no me preguntéis por qué. No lo sé.

Esta planta se encuentra en forma endémica en la parte sur de Andalucía y en el NW de África. Su descubrimiento se lo debemos ¡cómo no! a Charles Edmond Boissier.



Aguja. Erodium cheilanthifolium


Es verdaderamente preciosa.

Aguja. Erodium cheilanthifolium


El macizo del Fraile.


En la lejanía, montañeros del grupo granadino en la cuerda rocosa hacia la cumbre.


Alfarnatejo, al fondo, a la derecha.

Una vez en la cumbre, unos demuestran su poder moviendo en el aire una naranja con tan sólo la mirada...






Otros se interesan por su negocio que han dejado en otras manos para poder salir a la montaña...


Otros dedican unos minutos a la meditación...


 Y, por supuesto, la maravillosa "Eva" saca su estupenda manzana y nos mira eligiendo a su  "Adán"...



 Pepe, ¡cómo no iba a tocarte a ti la manzana...!



Y, otros, dedicamos el descanso a otear con prismáticos las cumbres cercanas en las que siempre hemos visto machos monteses..



Tras un rato de relax en la cumbre iniciamos el descenso por una "estupenda vereda " de las que nos gustan a algunos montañeros.


La "vereda".




Nos dirigimos en el descenso a la parte oeste del Fraile para bordearlo por los tajos septentrionales.


Y continúa la maravillosa "vereda".


 En la cumbre del Gomer me ha parecido ver lejanas figuras de cabras monteses.


Cara norte del Tajo de Gomer. 

Y, en efecto, con el zoom podemos apreciar un macho y una hembra mirándose a unas decenas de metros el uno de la otra.




Es un macho viejo que gira la cabeza, sorprendido, hacia el Fraile para contemplar a un grupo de "animales"  que están como cabras, con unas pezuñas y una joroba muy raras. Sí, claro, somos nosotros.



Nos dirigimos hacia una roca conocida como "El Frailecillo", cerca, esta vez sí, de una vereda que desciende hacia la parte norte de la montaña.


"El Frailecillo".







"El Frailecillo" vigilándonos desde su atalaya.

Encontramos un ejemplar de barbuda o chipirón de monte, un hongo comestible. Se llama barbuda porque al envejecer se licúa presentando en los bordes del sombrero unas formaciones a modo de barba de color negro como los chipirones.

Con la tinta de esta seta se firmaban los tratados en la Época Medieval Y, más recientemente, Hitler mezclaba la tinta normal con tinta de barbuda para firmar documentos. Y, con su gran desconfianza, a veces analizaba la firma con el microscopio electrónico para contemplar las esporas del hongo y cerciorarse de que el documento había sido firmado por él.



Barbuda. Coprinus comatus.



Descenso final con el Chamizo al fondo.



"Adán" y "Eva" en la Fuente del...

Y acabamos la ruta en el bar Cuenca en Mondrón, enfrentándonos a unas migas y a unos solomillos desafiantes. Ganamos nosotros, como siempre...





Salud montañeros.