Sábado 15 de noviembre de 2008.Hoy hemos decidido realizar una ruta "montañera-histórica-gastronómica".Desde Vélez-Málaga nos dirigimos por la autovía en dirección a Motril. A 4 km, antes de llegar a esta ciudad, hay un cruce a la derecha con la indicación "Granada". Tomamos esta desviación y, a unos 8 km, cerca de Vélez de Benaudalla, hay a nuestra izquierda un cruce sobre el Río Guadalfeo que nos lleva a Los Guájares. Transcurridos 5 km podemos observar abajo, a la izquierda, en la vertiente sur del Río de la Toba, el primero de los tres pueblos: Guájar Fondón. Muy cerca se encuentra Guájar Faragüit (330 ms de altitud). La carretera lo atraviesa longitudinalmente, pudiendo observar la Sierra del Chaparral, a nuestra izquierda, y la Sierra de los Guájares, a la derecha. Recorremos otros 5 km hasta el último de estos pueblecitos llamado Guájar Alto. Bajamos hacia el río y tomamos un largo y zigzagueante carril que nos acerca a la base del Pico Giralda.
Pico Giralda
Ascendemos al pico por un cortafuegos existente en su parte oeste. La pendiente es muy pronunciada pero no encontramos ninguna dificultad en la subida. Llegamos al vértice geodésico en apenas 50 minutos. Nos encontramos a 1.431 ms de altitud.
Las vistas son estupendas, se mire a donde se mire: al este, la Sierra de Lújar; al oeste, la Sierra Almijara y la Maroma; al suroeste, El Cerro del Fuerte y el Puntal (Sierra de Entresierras); y, al norte, el Caballo, pico más meridional de Sierra Nevada.
Cumbre del Pico Giralda
Permanecemos en la cumbre durante una hora, haciendo fotografías, comiendo alguna cosilla y contemplando con tranquilidad el paisaje.
Realizamos el descenso en 25 minutos hasta el coche. Pasamos por el Cortijo de Guájar la Vieja llegando al Río de la Toba y, posteriormente a Guájar Alto y Guájar Faragüit, donde nos detenemos para almorzar en el Bar-Restaurante La Parada. Tenemos la gran suerte de encontrar allí a Yasmín, una camarera colombiana cuya profesionalidad y calidez en el trato nos deja marcados gratamente, dejándonos aconsejar por ella desde el punto de vista gastronómico. Así, nos sorprende con un plato alpujarreño que dejamos "limpio" de una atacada, amén de unos entrantes de ibéricos deliciosos, todo ello regado con una jarra de cerveza y dos botellas de un buen vino del terreno. No está mal para cuatro miembros del Grupo Andax.
Plato Alpujarreño de Yasmín
Un poco "achispados" decidimos visitar el Yacimiento Medieval de el Castillejo que podemos contemplar sobre una loma, a 400 ms de altura, en la otra vertiente del Río de la Toba. Hay que bajar al río y, después, realizar el ascenso por una vereda muy bien marcada y señalizada. Paco hace de las suyas balanceándose en el puente por el que cruzamos el río. En el camino comemos chirimoyas y naranjas que cogemos de los árboles. Hago fotografías del brezo en flor. Tras unas cuantas carreras cuesta arriba, bajo los efluvios del elixir de Baco, llegamos a la cresta de la loma sobre la que se encuentra el poblado medieval que es un asentamiento islámico abandonado de forma repentina entre finales del siglo XIII y principios del XIV, siendo desconocidas hasta el momento las causas del abandono a pesar de los estudios realizados por la Universidad de Granada.
En el exterior pueden apreciarse los restos de una alberca y de un acueducto. En el interior, adosado a la muralla sur, hay un aljibe. Apreciamos abundantes restos de construcciones de casas de distinta superficie y forma.
Puente sobre el Río de la Toba
Echamos de menos a Javier, licenciado en Historia y especializado en Medieval que podría mostrarnos de forma clara las características principales de este asentamiento. Pero no ha podido venir hoy.
Yacimiento Medieval el Castillejo
La vista de Guájar Faragüit iluminado es preciosa, sobretodo de noche (nos anochece durante el descenso).
Después de un día bastante intenso y agradable que nos deja inolvidables recuerdos en la retina y en la cámara fotográfica, regresamos a casa.
